top of page

Carta #2. Las grandes preguntas

Hola Hacker,


Te escribo esta segunda carta porque en estos días y cada vez más, la inteligencia artificial(IA) asume muchas de nuestras tareas, y en los diferentes espacios salen artículos sobre el impacto de ChatGPT, automatización, ética, la Inteligencia Artificial General, desplazamiento de empleos o un nuevo cerebro para el ser humano. Estas noticias me generan emoción y miedo. Emoción por el progreso que puede generar y temor por aquellos no evolucionen.


Así que ven y te cuento algo, si repasas la historia y sus pensadores, encuentras que ellos han escrito de diversas formas que el aspecto más destacado del conocimiento o la experiencia no consiste en ser el mejor encontrando respuestas, sino más bien en aprender a hacer las preguntas correctas. Recuerdo estando en el colegio al famoso filósofo griego, Sócrates, que abordaba sus conversaciones con el talento griego aprovechando su mente inquisitiva para extraer respuestas incluso a las preguntas más profundas sobre la vida buscando guiar a su contraparte con preguntas cada vez más poderosas.


Te imaginas lo que sería Google para todos esos pensadores griegos, les hubiera dado todas las respuestas, siempre que hicieran las preguntas correctas, volviéndose más inteligente al recibir más y más preguntas. Seguramente ya te has imaginado un futuro en el que la IA tiene todas las respuestas, incluso si las obtuvo mediante el crowdsourcing de todas las personas, así que nos queda la responsabilidad principal de hacer preguntas relevantes.,


Tu, yo, o algunos conocidos, por otro lado, nos podemos volver más lentos y tontos, porque nuestra motivación para aprender, retener hechos, profundizar e ir más allá de la superficie de la información que se nos ofrece con el primer resultado de una búsqueda en Google disminuye, y con ello una poderosa competencia para transformar y evolucionar, nuestra curiosidad intelectual.


Y lo que estoy viendo, es cómo prevenir que tu curiosidad y la del talento latino comience a escasear. Así que, si eres curioso en la época de la IA, vas a tener una gran demanda. De hecho, la curiosidad es aclamada como una de las competencias más críticas para tu futuro y el del mundo del trabajo moderno. Para que me creas, la evidencia de la investigación sugiere que no es solo un predictor significativo de la empleabilidad tuya, países donde las personas tienen los niveles más altos de curiosidad también disfrutan de más libertad económica y política, así como de un PIB más alto.


Mientras que los trabajos se vuelvan predecibles, la IA lo hará por ellos, pero pero pero a medida que los trabajos futuros se vuelvan menos predecibles, más organizaciones contratarán a personas sobre la base de lo que podrían aprender, en lugar de lo que ya saben. Por supuesto, las carreras de las personas todavía dependen en gran medida de sus logros académicos, que (todavía) están influenciados por su curiosidad. Dado que ninguna habilidad se puede aprender sin un nivel mínimo de interés, la curiosidad puede considerarse uno de los fundamentos críticos del talento.


Como señaló Albert Einstein: “No tengo ningún talento especial. Sólo soy apasionadamente curioso.”, alimenta tus ganas de aprender y descifrar cómo hacer preguntas poderosas.


Te dejo esta pregunta: ¿Cómo puede América Latina acelerar su evolución en el mundo con el crecimiento de la Inteligencia Artificial?


¡Un abrazo fuerte! Ricardo Pineda Vila

bottom of page